
En Casa Sauza, la estrategia Proof Positive de Suntory Global Spirits no es un póster en la pared: es una forma de trabajar y vivir. Según comparte Nancy Montoya, Proof Positive representa 20% del desempeño global y se aterriza en tres vertientes que guían nuestras decisiones diarias: Community Positive, Nature Positive y Client Positive. Así es como se traducen en acciones con impacto real.
Community Positive: bienestar que empieza en casa y se expande a la comunidad
El corazón del eje social late fuerte con ELA (Equilibrio, Libertad y Armonía), un programa iniciado a finales de 2023 que trabaja en módulos (8–9 cuadernos con contenidos prácticos), una hora por semana, en grupos. Este año el foco es “Relaciones humanas positivas en el trabajo”: menos chisme, más escucha y respeto; detectar oportunidades personales y de equipo para construir ambientes sanos.
El compromiso social se extiende más allá de la fábrica. Dos iniciativas que mueven fibras:
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EDU CAMPO (con INE): colaboradores de Casa Sauza se certifican como instructores para que trabajadores de campo concluyan primaria o secundaria. Se hacen evaluaciones, cursos puente y acompañamiento hasta el certificado oficial. Ver a alguien firmar su nombre por primera vez no se olvida.
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Vivienda y redes de apoyo: construcción de casas para familias seleccionadas por Fundación Zapopan (con estudios serios de necesidad), y programas de acompañamiento a mujeres —incluidas acciones de donación—. Involucramos a hijos e hijas de colaboradores para que vivan el valor de ayudar “con sus propias manos”.
También hay historias que no caben en un ranking: casos de salud mental atendidos a tiempo —con apoyo psicológico y psiquiátrico— que cambiaron el curso de una vida. Eso también es Proof Positive.
Nature Positive: manos que siembran futuro
La sostenibilidad en Sauza se vive en equipo. Cuando el CRT tiene 1,000 árboles para plantar, pedimos 300 y vamos todos. Participamos en jornadas de limpieza de ríos y mantos acuíferos, y en iniciativas para reducir huella de carbono (en alianza con proyectos como Charco Bendito).
La invitación de Nancy es clara: el tema es técnico y estratégico, por lo que sugiere conversar con Juan José Ramos (gerente de sustentabilidad y excelencia operacional) para hilar indicadores de agua y energía con las metas corporativas de Suntory. Cultura japonesa, método y continuidad.
Client Positive: consumo responsable que educa y previene
Conectar con el consumidor es cuidar su bienestar. Por eso Casa Sauza impulsa a FISAC, asociación civil que promueve responsabilidad y moderación en el consumo de bebidas alcohólicas. El enfoque es práctico y cercano:
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Train the Trainer: formamos a colaboradores, familias y universidades con talleres interactivos, dinámicas de “mitos y realidades”.
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Efecto multiplicador: docentes como Carla Lisárraga (UNIVA) hoy replican estos contenidos en el aula, llevando el mensaje a nuevas generaciones.
Educación, evidencia y empatía: las tres piezas de un consumo responsable que trasciende campañas.
En una frase:
Proof Positive en Casa Sauza es hacer lo correcto —por nuestra gente, por la tierra y por el consumidor— y hacerlo todos los días.
La anécdota que explica todo
Quien ha entregado las llaves y el título de propiedad de una nueva casa conoce ese silencio que se rompe en lágrimas. Pero Nancy recuerda, sobre todo, la discreción de ELA: cuando una intervención oportuna evita una tragedia, entiendes de qué se trata la palabra “propósito”.
Los retos del triple impacto (social, ambiental, económico)
El desafío más grande es económico y cultural: movilizar recursos, voluntariado en fines de semana, donaciones de comunidad y proveedores; evitar que “todo lo haga la empresa”. Requiere constancia, comunicación y construir una cultura de corresponsabilidad. El modelo funciona porque la gente participa y ve resultados.
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Nancy Montoya